Se trata de la
Ballena Azul. En algunos ejemplares se han encontrado longitudes de
33 metros y pesos de 190 toneladas,
con tamaños ligeramente superiores en las hembras que en los machos.
Estos ejemplares de gran tamaño, observados en los años 1930, no han
sobrevivido a la caza del hombre. En la actualidad los ejemplares
supervivientes alcanzan tamaños más reducidos, de unos 25 metros.
Actualmente (diciembre de 2005) una de las áreas con mayor población de
ballenas azules es la zona en torno a las
Islas del Atlántico Sur.
El nombre de la especie, Balaenoptera
musculus significa curiosamente “
ratoncito”
en latín. Fue escogido por Linneo como broma acerca del tamaño de este
animal, que de hecho es el mamífero más grande que ha existido jamás.
Se alimenta de krill, pequeño organismo planctónico semejante al
camarón y algunos peces pequeños. Su vientre tiene un color grisáceo o
amarillento debido a la presencia de algas que se adhieren a él. Su
parte superior y laterales varían de color desde el azul al gris
azulado. Su cabeza es muy alargada y fina. Al no tener dientes es un
misticeto.
Este animal puede llegar a tener
un corazón tan grande como un automóvil pequeño,
su lengua es tan grande como un elefante adulto y su cerebro pesa
cuatro veces más que del humano mostrando signos de gran inteligencia.
Su ritmo cardíaco en momentos de esfuerzo es de tan sólo 18 a 20
pulsaciones por minuto, en contraste con las 120 normales en los humanos
en parecidas circunstancias. En las partes mas anchas de sus venas una
persona alta podría permanecer de pie (1,80 m de diámetro).
Esqueleto de ballena azul afuera del Laboratorio Marino de la Universidad de California, en Santa Cruz, CA. EUA.
Las ballenas azules
viven hasta 90 años en buenas condiciones. Sin embargo debido a su caza la media de edad es de 25 años.
Según algunos estudios,
los cantos de una ballena azul podrían
ser escuchados y entendidos por otros individuos a una distancia de
4.000 km, sin embargo el aumento del ruido en el mar provocado por las
actividades humanas y sus motores merman esta capacidad.
Su tasa de natalidad es muy baja ya que les toma alrededor de 10 años
desarrollarse hasta la madurez y sólo tienen una cría en un periódo de
entre 2 a 5 años.
En la actualidad los expertos calculan que sólo quedan unos 1.000
ejemplares, la especie ha sido cazada casi hasta la extinción para
obtener sus huesos, aceite y carne.